Visitar bodegas, alojarse entre viñedos, saborear la gastronomía o catar sus vinos y cavas; conocer su patrimonio arquitectónico, participar en sus fiestas populares, y descubrir el territorio con sus rutas culturales, o las rutas senderistas y cicloturistas entre viñedos, forman parte de la oferta turística del Penedès.

 Redacción

 

La región del Penedès, se encuentra situada a menos de 30 minutos de Barcelona, dirección sur, y a 15 minutos de las magníficas playas de Sitges, en un entorno paisajístico rural único, caracterizado por sus interminables viñedos, salpicados por establecimientos de turismo rural, elementos patrimoniales únicos y las múltiples bodegas y cavas que han conferido un reconocimiento internacional a esta zona. En coche, en bicicleta, o a pie, desde la playa hasta las montañas del prelitoral, el Penedès ofrece una completa y variada oferta turística, adaptada a todas las necesidades y preferencias.

 

Estancia en Barcelona

La región del Penedès, gracias a su excelente ubicación, es un complemento ideal a su estancia en la ciudad de Barcelona, para conocer otras zonas de Cataluña, como la ciudad de Tarragona, las montañas de Montserrat, la Ruta del Císter o el Delta del Ebro. A la vez, si lo prefiere, en el Penedès podrá relajarse y recuperarse del ajetreo de su viaje en un entorno rural único, con una excelente gastronomía y sus excepcionales vinos y cavas.

 

Vino y gastronomía

El Penedès es una de las principales zonas vinícolas del mundo, con una tradición que se remonta al siglo IV a.c. y a la vez, es la región dónde se elabora el cava, uno de los más prestigiosos vinos espumosos del mundo. Sus más de 200 bodegas y cavas, repartidas por toda su geografía. Ofrecen múltiples actividades entorno a este producto, como visitas, cursos de cata, maridajes,… una riqueza vínica que se complementa a la perfección con una variada gastronomía de origen 100% mediterráneo.

 

 

Cultura y patrimonio

Desde asentamientos íberos, hasta la arquitectura modernista, pasando por castillos medievales, el visitante puede hacerse una clara idea de la importancia estratégica, y de la importancia económica de esta región a lo largo de su historia.

Fiestas y tradiciones centenarias completan esta rica oferta cultural y patrimonial.

 

Naturaleza y paisaje

Un mar de viñedos, confiere al Penedès la singularidad de un paisaje que cambia su color con las estaciones del año; un paisaje salpicado por las típicas masías de la zona, alrededor de las cuales discurre el trabajo en el campo, o que, en algunos casos, se han convertido en establecimientos turísticos ideales para interactuar con el territorio, y gozar de una estancia rural inmejorable.

 

 

Escápese a la playa

A tan sólo 15 minutos del corazón del Penedès, encontramos las playas del Garraf, y sus poblaciones de Sitges y Vilanova y la Geltrú, dónde podemos disfrutar de un día de sol y playa, como complemento ideal a su estancia en el Penedès.

 

Ruta del Cava

La zona de producción del cava la integran 160 municipios. El Penedès concentra más del 95% de dicha producción y Sant Sadurní d’Anoia concentra más del 75%. En 1872 se elaboraron las primeras botellas, en 1972 se constituyó el Consejo Regulador de Vinos Espumosos y en 1993 el primer Consejo Regulador del Cava. La historia: los estudios de microbiología de Louis Pasteur aplicados al vino permitieron controlar la segunda fermentación en la botella y el descubrimiento del tapón de corcho hizo que no se perdiesen las burbujas. Así nació el método tradicional o champenoise, técnica que durante el siglo XIX varias familias de Sant Sadurní d’Anoia aplicaronn a los cultivos. Con los ensayos del Instituto Agrícola Catalán de Sant Isidre, se apostó por las variedades autóctonas de uva blanca, de donde nació el cava. En 1872, Josep Raventós, de Codorniu, elaboró las primeras 3.000 botellas de cava según el método de la segunda fermentación. Su hijo y heredero, Manuel Raventós, inició la expansión de la casa, mientras que otros productores también comenzaron a elaborar cava. Durante la década de 1920, el cava ganó fuerza en el mercado, y se consolidó internacionalmente en los ochenta. Hoy es uno de los sectores más dinámicos, con una producción de más de 200 millones de botellas al año.

 

Sant Sadurní d’Anoia: es la capital del cava. Las cavas salpican los campos y permiten conocer desde dentro el proceso desde la bodega hasta la prensa y el embotellamiento. Es obligada la visita a las cavas Codorniu, del arquitecto modernista Puig i Cadafalch, con 26 kilómetros de cavas subterráneas, y también las cavas Freixenet, Torelló, Raventós i Blanc y Gramona. Un paseo por el casco urbano nos permite contemplar interesantes ejemplos de arquitectura modernista, como las casas de Lluís M. Güell o los almacenes Santacana Roig, de Domènech Boada.

Los caminos del cava: las rutas del vino y del cava del del Consorcio de Promoción Turística del Alt Penedès ofrecen la posibilidad de visitar otras cavas gracias a diversas rutas que recorren algunos municipios de la comarca a través de las bodegas, pueblos y monumentos más emblemáticos.

El cava: ideal para el aperitivo o también para acompañar las comidas, se ha ganado un lugar en el mercado mundial de vinos. Brut, seco, semiseco o dulce, según la concentración de azúcar residual, se acostumbra a servir en copa de vidrio para apreciar el recorrido de las burbujas.

Semana del Cava: celebrada en Sant Sadurní, sirve para promocionar este producto en Catalunya. De los actos festivos, destacan la coronación y el pregón de la reina del cava, el recorrido del tren del cava y el Cavatast, una muestra de cavas y gastronomía del Penedès.

 

Más información:

 www.enoturismepenedes.cat