Alcalá de Guadaíra es uno de los centros neurálgicos históricos del flamenco y cuna de algunas de las formas de cantes por soleá –estilo matriz en el flamenco- más bellas que existen. Se conocen genéricamente como soleá de Alcalá y nacieron del magma creativo de la familia gitana de los Gordos, vinculada siempre al barrio de San Miguel – El Castillo. Su máximo exponente fue Joaquín el de la Paula (1875-1933).Esta semana, el prestigioso pintor Patricio Hidalgo -acompañado por grandes nombres del cante jondo como Tomás de Perrate o La Tremendita, entre otros) protagoniza una original intervención artística en la que durante los muros del barrio gitano de San Miguel – El Castillo van a servir de lienzo al servicio de su creatividad para, en última instancia, homenajear al mítico creador de estos estilos.
Redacción
“Que hablen los muros” es el título de esta iniciativa artística con la que el Ayuntamiento de Alcalá de Guadaíra implementa su ruta cultural y turística “El camino de la soleá”. De esta forma, el arte se pone al servicio del arte y del pueblo gracias a una de las creaciones musicales más hermosamente ricas que ha dado un arte popular como el cante jondo: la soleá. Entre el lunes 9 y el sábado 14 de noviembre, Patricio Hidalgo abordará con su arte muros, fachadas, medianeras, calles, adarves y plazuelas del barrio de San Miguel-El Castillo para que el mundo de la soleá vuelva a estar presente en estos que son sus caminos. Mundo que también será evocado desde la poesía con las intervenciones de los poetas David Eloy Rodríguez y José María Gómez Valero. Como colofón, a este recital de pintura se unirá, al mediodía del sábado 14 de noviembre, el sonido de la propia soleá de Alcalá con las voces de primeras figuras del cante jondo como Tomás de Perrate, Rosario la Tremendita,Ana La Yiya, David Hornillos y Niño Mauro.
El Camino de la Soleá: itinerario turístico y cultural
El Castillo de Alcalá de Guadaíra es toda una referencia del cante por soleá. Sus calles vieron discurrir la vida de Joaquín el de la Paula y toda su famila. Sus muros tienen impreso en su ser el eco de sus letras cargadas de poesía directa y esencial:
“Al cielo no miro yo,
porque me miro en tus ojos,
que son del mismo color”.
Este barrio, estas calles, estos muros tanto tiempo huérfanos de la presencia de uno de los elementos que le dan sentido, van a recobrar su esencia flamenca con la creación de El Camino de la Soleá, un itinerario cultural y turístico en el que las pinturas murales de Patricio Hidalgo recreando el universo de la soleá serán algunos de sus principales reclamos.
Toda esta actividad promovida y financiada por al Ayuntamiento de Alcalá de Guadaíra -a través del Plan Urban– y organizada por Endirecto FT, contando con la imprescindible colaboración de la Asociación de Vecinos Tres Arcos.
Una vez más, los muros del Castillo de Alcalá sean acariciados por la sutileza dolorida de la soleá:
“Cómo me gusta escuchar
las campanas de las monjas,
cuando me voy a acostar”
Patricio Hidalgo y la intelectualización de lo popular
Joaquín el de la Paula y su familia – a la pertenecen también otros nombres míticos de la historia del arte jondo como Agustín Talega, Juan Talega o Manolito el de María– lograron que un humildísimo barrio situara a Alcalá de Guadaíra como uno de los epicentros mundiales de un arte señalado como por la Unesco como Patrimonio Cultural Inmaterial de la Humanidad: lo popular sublimado a arte.
Ahora, el artista plástico Patricio Hidalgo plantea el recorrido inverso: volver a lo popular desde la intelectualización de los sentimientos más irracionales de lo jondo. Con un proyecto articulado en diferentes dimensiones creativas, Patricio Hidalgo persigue dotar de contemporaneidad al arraigado universo jondo del barrio del Castillo. Y lo va a hacer sumergiéndose una semana entera (del 9 al 14 de noviembre) en el barrio para acometer su proyecto “Que hablen los muros. Recital de pintura en los muros del barrio de San Miguel”
En este nuevo proyecto de investigación artística Patricio Hidalgo decide gestar la pintura de lo flamenco en este barrio donde el arte no solo se ha manifestado de forma natural sino que además sirvió de polo de atracción a otros grandes artistas e investigadores de lo jondo, como Antonio Mairena (Medalla de Oro de las Bellas Artes).
Valorización de la arquitectura insignificante
El soporte van a ser los muros y las paredes para que el barrio de San Miguel se transforme en una galería abierta: arte para el pueblo. Obras destinadas a perecer por su exposición en la intemperie y el paso del tiempo, pero que quedarán al alcance de todos, sin posibilidad de trasladarlas ni venderlas para romper así con la idea de la obra pictórica como objeto de valor económico o reservado a coleccionistas. La obra de arte en la calle como parte del paisaje con el fin de potenciar su valor simbólico y contemplativo.
La intervención de Patricio Hidalgo en El Castillo pretende dotar de significado artístico a elementos arquitectónicos muertos: fachadas de edificios sin uso o abandonados, muros de ladrillo visto que cercan espacios vacíos, rincones, espacios sin alma…
Proceso e interacción
Patricio Hidalgo concibe el proceso de creación como parte fundamental del hecho artístico. Así, otra acción paralela a la intervención en los muros es el registro en imágenes del proceso pictórico, además de mostrar la especial relación que se va a establecer entre el artista y los habitantes del barrio gracias a la peculiaridad del proyecto.
Desde el respeto, y con una mirada indagadora y pausada, el artista pretende crear un material que refleje un acontecer artístico que se acerca al pueblo, a la gente. Esa inmersión -que afectará sin duda a la creación- persigue la apropiación directa de la obra por parte de los vecinos y trata de captar su evolución in situ. El material grabado será organizado siguiendo las premisas del género documental de autor y vídeo-creación. En definitiva, esta otra vertiente del proyecto quiere atestiguar -desde el prisma que brinda la creación cinematográfica- una acción atrevida y directa que escapa de los convencionalismos artísticos cada vez más alejados de su base popular y que deposita en el Arte la confianza que se merece como poderosa y necesaria herramienta en la evolución del ser humano.
Ecos de la soleá en Alcalá
El conjunto de intervenciones van a estar inspiradas el mundo de lo jondo: alegorías a la historia de este lugar mediante objetos o imágenes inspirados en un mundo de lo popular que recorre el pasado y el presente de este barrio.
Finalmente, resultaría inconcebible el homenaje a la Soleá de Alcalá sin que sus ecos choquen contra sus muros resucitados por y para el arte. El sábado 14 de noviembre y a plena luz del día, el acto de clausura del proyecto estará protagonizado por una ceremonia de comunión entre el cante y la pintura: las voces de Tomás de Perrate y Rosario la Tremendita, Ana la Yiya. David Hornillo y Niño Mauro interpretarán estos melancólicos cantes mientras Patricio Hidalgo crea en vivo las últimas obras de la intervención.
En total, el proyecto constará de seis días de estancia en San Miguel para la ejecución de unas 25-35 intervenciones, con la clausura de cante, guitarra y pintura en vivo.
Patricio Hidalgo, el artista de lo jondo
Desde sus comienzos, Patricio Hidalgo (Ibiza, 1979) ha orientado su indagación plástica hacia esta vertebración de flamenco y pintura, partiendo de su pertenencia sanguínea a esa matriz del cante jondo que es La Puebla de Cazalla, e instalándose en esta localidad tras un periplo de formación académica que recorrió las universidades de Barcelona, Madrid y Sevilla, donde se licenció en Bellas Artes. La elección no fue gratuita, sino fruto de su empeño por adentrarse en el flamenco, por penetrarlo y hacerlo suyo… Y por dejarse tomar por él. Solo así ha sido posible que el flamenco alcanzara en su pintura verdadera expresión formal, sin impostura, con verdad, con jondura.
Alcalá de Guadaíra en las Rutas del Flamenco
Alcalá de Guadaíra es por derecho propio parte de la Ruta del Compás del tres por cuatro. Ruta de los llamados cantes básicos que une Triana con Jerez, pasando por Dos Hermanas, Utrera, Mairena del Alcor, Lebrija y, desde luego, Alcalá de Guadaíra o Alcalá de los Panaderos, que también así se conoció. La gran aportación alcalareña al flamenco viene de la mano de la soleá y del gran maestro Joaquín el de la Paula, que junto a otras grandes figuras locales como Bernardo el de los Lobitos, el Platero de Alcalá, Manolito de María o Agustín el Gordo, han dado forma y personalidad a este cante autóctono.
A partir de ahora, el aficionado al flamenco y a la cultura andaluza tendrá un importante motivo más para visitar Alcalá: el arte expuesto por Patricio Hidalgo en las paredes y muros de su barrio de San Miguel – El Castillo. Lo popular sublimado a arte, y viceversa.
Proyecto Flamenco en el Mundo
El recital de pintura de en los muros del Barrio de San Miguel – El Castillo “Que hablen los muros” cuenta con la implicación del Proyecto Flamenco en el Mundo, impulsado por la productora de artes escénicas Endirecto FT y la Asociación Flamenco en el Mundo, proyecto que tiene el apoyo de Marca España.
Proyecto artístico
“QUE HABLEN LOS MUROS. RECITAL DE PINTURA EN LOS MUROS DEL BARRIO DE SAN MIGUEL”
Del 9 al 14 de noviembre.
Organiza
Ayuntamiento de Alcalá de Guadaíra
(Proyecto de mejora de la identidad visual del barrio de san miguel-el castillo. Programa urban)
Espectáculo de Clausura: 14 de octubre.
Action painting con la participación de músicos flamenco en directo y espectáculo audiovisual (Video Arte)
ROSARIO LA TREMENDITA
TOMÁS DE PERRATE
ANA LA YIYA
NIÑO MAURO
DAVID HORNILLOS
Y los poetas
JOSÉ MARÍA GÓMEZ VALERO
DAVID ELOY RODRÍGUEZ