Un itinerario circular que permite recorrer los principales espacios protegidos de la provincia de Soria, como  los Picos de Urbión o el Sabinar de Calatañazor

Kiko Martínez.

A pesar de su reducida extensión, con poco más de 10.000 kilómetros cuadrados, la provincia de Soria alberga una variedad paisajística y natural que merece la pena descubrir de una forma pausada. Y para ello, una de las mejores alternativas es recorrer el llamado Sendero Ibérico Soriano, el GR-86, que atraviesa la práctica totalidad de las sierras sorianas y que, además, de cara al 2013, ampliará su itinerario hasta completar un círculo perfecto de casi 700 kilómetros.

 Soria presenta un paisaje heterogéneo que abarca desde la alta montaña hasta los valles más profundos, pasando por los pastizales de verano y los viñedos cercanos a la Ribera del Duero. Bosques y riachuelos; parajes solitarios y espacios naturales protegidos donde se conservan las más variadas especies vegetales y animales.

Entre esos espacios cabe destacar el Parque Natural de Picos de Urbión y la Laguna Negra, el Parque Natural del Cañón del Río Lobos, el Monumento Natural de La Fuentona y el Espacio Natural del Sabinar de Calatañazor. Templos de incalculable valor medioambiental y que pueden ser descubiertos, paso a paso, gracias a las numerosas rutas de senderismo que jalonan la provincia. De entre todas ellas, sobresale el itinerario del GR-86.

El Sendero Ibérico Soriano, como se conoce al GR-86, cuenta con un recorrido de 510 kilómetros, repartido en 22 etapas del trazado principal, más 13 etapas correspondientes a sus variantes y derivaciones, con longitudes comprendidas entre los 6 y 23 kilómetros. Sus extremos son las localidades de Ágreda, Almazán y las ruinas celtíbero-romanas de Tiermes. Además, llega hasta las cumbres de los Picos de Urbión y del Moncayo.

De cara al 2013, además, la Diputación de Soria ampliará el trazado del GR-86 con 5 nuevas etapas, 2 ramales y 3 variantes. Con esta actuación se pretende realizar un cerramiento circular de todo el recorrido. Aunque todavía quedan por definir algunos detalles en colaboración con los ayuntamientos incluidos en el trazado, la Diputación estima que esta ampliación supondrá el incremento del GR-86 en torno a los 160 ó 170 kilómetros.

En definitiva, este tipo de recorridos nos ofrece una forma especial de viajar, de conocer una región pausadamente y en profundidad, con la posibilidad de percibir lo más inaccesible y genuino, mostrando a su paso la variedad de sus comarcas y el tránsito de una a otra, con sus rasgos comunes y diferenciales. Sin olvidar la posibilidad realizar diversas actividades de turismo activo y aventura como espeleología en la cueva de La Galiana o esquí de fondo en el Punto de Nieve de Santa Inés en temporada invernal.