Noruega cambia completamente con cada estación. En invierno reina la oscuridad y las mágicas Auroras Boreales, la primavera da paso al deshielo, abundantes cascadas y árboles frutales en flor, el otoño muestra el lado más cultural del país y el verano abre las puertas a los Fiordos Noruegos y a la ininterrumpida luz del Sol de Medianoche en el Norte de Noruega.

Texto y fotos: Turismo de Noruega

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Noruega se va despidiendo de la magia de las Auroras Boreales para dar paso a otro fenómeno casi igual de mágico: El Sol de Medianoche. El 14 de Abril amaneció de nuevo en Longyearbyen (en el Norte de Noruega) tras varios meses sin salir y el 14 de Mayo en Cabo Norte, el punto más septentrional de Europa continental. Poco a poco toda la superficie de Noruega situada por encima del Círculo Polar podrá disfrutar de este singular fenómeno. En Tromsø, la capital ártica el sol salió el 20 de Mayo y en Las Islas Lofoten tendrán que esperar hasta el 28.

 A mayor horas de luz, mayor posibilidad de explorar el Norte de Noruega
Además de la experiencia de ver como el sol baja hasta el horizonte sin llegar nunca llega a ponerse y de poder disfrutar de la belleza de la luz de un atardecer y amanecer casi a un tiempo, el hecho de tener luz las 24 horas ofrece una oportunidad inigualable para aprovechar el tiempo y los atractivos que nos ofrece el Norte de Noruega en verano. Y no se nos ocurre mejor manera que disfrutando de actividades en la naturaleza a cualquier hora del día o de la “noche”. Estos son tan sólo algunos ejemplos:

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Kayak: esta actividad no requiere de experiencia previa y el viajero siempre va acompañado de un guía. Los destinos más aconsejados para esta actividad son las islas Lofoten y Vesterålen, Tromsø o Kvaløya, conocida como la Isla de la Ballena.
Senderismo: Es importante conocer el nivel de dificultad de cada ruta y hacerse con un mapa o gps. Una vez resueltos ambos puntos, el senderismo bajo el sol de medianoche es una de las actividades más espectaculares de todas. El límite lo pone el viajero, nunca las horas de luz.
Ciclismo: Existen muchas rutas en bicicleta por el Norte de Noruega que conducen hasta altas cimas de montaña con vistas a fiordos o hasta las playas más desiertas de arena blanca y aguas cristalinas. Sin duda, alquilar una bicicleta y pedalear, tanto por la costa como por el interior, supone un viaje al profundo y verdadero Norte de Noruega.
Conducir por Carreteras Turísticas Nacionales: Estas carreteras nacen con el objetivo de ofrecer un camino alternativo a las carreteras principales, mostrando así la riqueza natural del país y su auge arquitectónico, siempre respetuoso con el entorno natural. Está previsto que en 2020 las 18 Carreteras Turísticas Nacionales queden completamente construidas, ofreciendo algunos de los mejores escenarios naturales del mundo bajo el sol de medianoche y unas vistas increíbles en cada curva.
Golf: Noruega cuenta con una multitud de campos de golf y si además se le añaden 24 horas de luz para poder practicarlo en el momento del día que uno desee, las vacaciones se tornan de lo más privilegiadas. Lofoten goza de varios campos, uno de ellos cuyo mayor espectador es el mar y otros dos campos donde la montaña ejerce de árbitro.
Pesca: esta actividad permite adentrarse en la tradición más norteña de Noruega, entendiendo el amor ciego de muchos pescadores por el mar y el gozo de cenar lo que uno mismo captura. Ya sea bien con capitán o por uno mismo, una mañana, tarde o noche dedicada a la pesca es de lo más reconstituyente.